

“No me sorprendió que el lunes, justo cuando comenzó a funcionar el nuevo esquema cambiario, las cuatro grandes aceiteras enviaran listas de aumentos del 9% en sus productos. Nosotros no estamos en condiciones de aceptar estos aumentos, principalmente porque el mercado no puede absorberlos”, declaró en las últimas horas Vasco Martínez.
En ese sentido, el líder de la ASU reconoció que los productos cuyos costos superan el 80% de su valor en componentes dolarizados, “no pueden ser objeto de subas tan significativas sin una justificación adecuada”.
Por otro lado y haciendo referencia al momento por el que está atravesando el mercado, Martínez reconoció que la caída en el consumo en los supermercados sumado al contexto de menor poder adquisitivo y demanda, generó que fuese “aún más difícil aceptar las subas”. Y sumó: “No existía ningún mercado ni consumidor que pudiera asumir los impactos de un aumento tan alto en estos productos esenciales”.
Las declaraciones del dirigente llegaron horas después de que los supermercados se negaran a recibir las listas de precios nuevos de las empresas Unilever y Molinos quienes, después de confirmarse el levantamiento del cepo cambiario, retocaron sus valores entre un 9% y un 12%.