

Fue el cosecretario general de la CGT, Octavo Argüello quién en las últimas horas ratificó que marcharán junto a los jubilados al Congreso, “aunque haya protocolo antipiquetes” dispuesto por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En cuanto al paro general, que comenzará a las 00.00 del jueves 10 y se extenderá hasta las 23.59 de ese mismo día, será una nueva marcha en contra de las políticas implementadas por el oficialismo y buscará “exigir la libertad para negociar paritarias libres y acuerdos homologados; aumento a los jubilados y actualización del bono y volver a discutir las asignaciones familiares”, tal las propias palabras de Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la CGT.
Es preciso señalar que entre los servicios que frenarán por completo se encuentran los transportes (trenes, subtes, marítimo, aéreo y de carga), los bancos, las escuelas y universidades públicas como así también la administración pública. Mientras que los taxis, los comercios, la educación privada, la salud pública y privada, gastronomía y las estaciones de servicios mostrarán un acatamiento dispar a la medida de fuerza.
Por su parte y, a pesar de que en un momento también se iban a adherir, sí habrá servicio de colectivo ya que, como se encuentra en conciliación obligatoria con la Secretaría de Trabajo, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) está obligada a no parar.