

De esta manera y en comparación con los números que se habían registrado en el primer semestre de ese mismo año (52,9%), la significativa baja fue del 14,8%; mientras que la indigencia fue del 8,2%, cuando en el inicio del 2024 había marcado un 18,1%.
A su vez y yendo a los números en crudo, desde el organismo Nacional informaron que 6,9 millones de personas salieron de la pobreza; mientras que 4,64 millones dejaron de ser indigentes.
Desglosando los números de la pobreza región por región, los indicadores reflejaron una mejora en el Gran Buenos Aires, donde se registraron 5,9 millones de pobres y 1,3 millones de indigentes y en la Ciudad de Buenos Aires, 501.238 personas son pobres y 70.680 se encuentran en situación de indigencia. Mientras que, la zona más afectada es el Noroeste Argentino (NEA), comprendido por las provincias de Chaco, Formosa, Corrientes y Misiones, con 692.222 pobres y 171.608 indigentes.
Después de conocerse los nuevos datos, desde el Gobierno Nacional emitieron un comunicado en el que apuntaron contra la gestión de Alberto Fernández, Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa y en el que afirmaron que la baja de la pobreza es un “efecto directo de la lucha contra la inflación que ha llevado adelante Javier Milei, además de la estabilidad macroeconómica y la eliminación de restricciones que, durante años limitaron el potencial económico de los argentinos”.