

“La administración de Trump arrestó a 538 inmigrantes ilegales delincuentes, entre ellos, un presunto terrorista, cuatro miembros de la pandilla Tren de Aragua y varios inmigrantes ilegales condenados por delitos sexuales contra menores”, explicó Karoline Leavitt, la secretaria de prensa de la Casa Blanca.
A su vez, añadió que “la mayor operación masiva de deportación en la historia está en marcha”. Y sentenció: “¡Promesas hechas, promesas cumplidas!”.
Además, la voz autorizada del Gobierno estadounidense sostuvo que “Trump está enviando un mensaje fuerte y claro al mundo entero”. Y concluyó: “El mismo es que cualquiera que ingrese ilegalmente a los Estados Unidos, enfrentará severas consecuencias”.