Al igual que en Davos, Milei se diferenció con un discurso anti-globalista, anti-socialista y defendió la libertad

Ante la atenta mirada de la secretaria General de la presidencia, Karina Milei; el ministro de Economía, Luis Caputo; la canciller Diana Mondino y el embajador argentino en Estados Unidos, Gerardo Werthein; Milei confirmó que Argentina no firmará la Agenda 2030 al considerar que “no es otra cosa que un programa de Gobierno supranacional que atenta contra la soberanía de los Estados-Naciones y violenta el derecho a la vida, la libertad y la propiedad personal”.

Continuando por esa línea, argumentó: “Es una agenda que pretende solucionar la pobreza, la desigualdad y la discriminación con legislación que las profundiza. La historia del mundo demuestra que la única manera de garantizar la prosperidad, es limitando el poder del monarca, garantizando la igualdad ante la ley y defendiendo el derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad de los individuos”.

En otro tramo de su discurso, que duró alrededor de 15 minutos, el mandatario recordó que la ONU nació “del horror de la guerra más cruenta de la historia global, con el objetivo principal de que nunca volviera a ocurrir”, para luego aseverar que, en el último tiempo, se transformó en un “leviatán de múltiples tentáculos que pretende decidir no sólo qué debe hacer cada Estado-Nación, sino también cómo deben vivir todos los ciudadanos del mundo”.

Además de exponer que la entidad pretende “imponer un modelo de Gobierno supranacional de burócratas internacionales”, en el cierre de su discurso, Milei expresó: “Hemos visto como una organización que nació para defender los derechos del hombre, ha sido una de las principales propulsoras de la violación sistemática de la libertad, como por ejemplo con las cuarentenas a nivel global durante el año 2020, que deberían ser consideradas delitos de lesa humanidad”.