

Pasada la una de la madrugada de Argentina, el presidente del Consejo Elector de Venezuela (CNE), Elvis Amoroso, se presentó ante las cámaras y, para sorpresa de todos los presentes, anunció una tendencia “irreversible” para Nicolás Maduro con el 51,2%; contra el 44,2% obtenido por el candidato opositor, Edmundo González Urrutia.
Tras conocerse el fraude, los líderes opositores María Corina Machado y Edmundo González Urrutia aseguraron que “todo el mundo” sabe que la ganadora, con más del 70% de los votos, es su fuerza. Además de autoproclamarse ganador, González Urrutia denunció: “Aquí se han violado todas las normas, al punto de que aún no han sido entregadas la mayoría de las actas”.
Más allá del estupor local, la victoria de Maduro tampoco es reconocida por la comunidad internacional, quienes le brindaron todo su apoyo a Machado-González Urrutia y se mostraron en contra del dictador. Entre los mensajes destacados se encuentra el del presidente Javier Milei, quien afirmó que “Argentina no va a reconocer otro fraude” y puntualizó: “Los venezolanos eligieron terminar con la dictadura comunista de Nicolás Maduro. Los datos anuncian una victoria aplastante de la oposición y el mundo aguarda que reconozca la derrota luego de años de socialismo, miseria, decadencia y muerte”.
Más allá del mandatario argentino, otro de los que también se pronunció fue el presidente chileno, Gabriel Boric, quien además es uno de sus aliados internacionales. “Desde Chile, no reconoceremos ningún resultado que no sea verificable. El régimen de Maduro debe entender que los resultados que publica son difíciles de creer”, expresó a través de la red social X.
Asimismo, su par de Panamá, José Raúl Mulino, se sumó al “rechazo generalizado respecto del resultado electoral en Venezuela” y reconoció que su nación aspiraba a que “se respetara la voluntad popular”; mientras que el jefe de Estado de Uruguay, Luis Lacalle Pou, aseguró que el “proceso estuvo viciado”.
Por su parte y además del llamado que mantuviera Lula da Silva con Maduro para solicitarle que reconociera su derrota; el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, pidió que el recuento de votos sea “justo y transparente”; mientras que Reino Unido solicitó la publicación “rápida y transparente” de los resultados completos.
Sergio Solon, periodista y director de Expreso News, dejó su mirada sobre lo ocurrido: "Maduro se robó la elección antes de que se vote. Estamos en presencia del fraude más grande de la historia. Para lograr hacer esto, tuvo la luz verde de varios gobiernos (oh casualidad Rusia y China, cuyos líderes son los únicos que lo han felicitado a Maduro por su supuesto éxito. Está claro que a Putin y Xi Jinping, lo único que les interesa son los recursos naturales de Venezuela y no el pueblo)... Contó además, con la complicidad de los militares y del Poder Judicial. No se podrá entonces, sacarlo vía elecciones porque la corrupción de su narco Estado ha contaminado todas las facetas. Por lo tanto, el único camino para algún día terminar con esta dictadura tendrá que ser por la fuerza y eso implicará, lamentablemente, derramamiento de sangre".