

En una votación que contó con el apoyo de los 51 legisladores, la Cámara alta determinó que a partir de ahora, todos los 18 de julio será considerado como día de duelo nacional en homenaje a la víctimas que fallecieron en el atentado a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), por lo que “la bandera nacional permanecerá izada a media asta en los edificios y lugares públicos”.
Asimismo, se estableció que “el Ministerio de Educación, mediante el Consejo federal de Educación, en coordinación con las autoridades educativas de las provincias y la Ciudad de Buenos Aires, dispondrá de los medios necesarios a fin de que los establecimientos de educación pública primarios y secundarios de gestión estatal y privada, organicen y desarrollen actividades conmemorativas para dicha fecha”.
A lo largo de la sesión, todos los senadores consideraron que el atentado contra la AMIA es un hecho que “ensombrece a la historia argentina”, pero también advirtieron sobre las intenciones de los grupos terroristas de “sembrar miedo” y “generar pánico”.