

Tras las reuniones y luego de haber tomado la decisión de mantener las tasas de interés en el rango de 5,25% a 5,50% desde la FED emitieron un comunicado en el que aclararon que “no se espera que sea apropiado reducir el rango objetivo hasta que haya adquirido una mayor confianza en que la inflación se está moviendo de forma sostenida hacia el 2%”.
La resolución tomada por la FED surgió a raíz de lo costoso que está siendo para el Gobierno de Estados Unidos regresar a una inflación anual del 2%, sumado a que en el mes de abril, las nóminas de empleo aumentaron más de lo esperado, generando un recalentamiento de la actividad económica que impide ajustar el sendero inflacionario.
Es preciso mencionar que de acuerdo a los datos oficiales y teniendo en cuenta el fuerte aumento que sufrió el transporte, sumado a la volatilidad en los precios de los alimentos y la energía; en el mes de marzo la inflación anual escaló al 3,5%.