

En las primeras horas de la mañana, cientos de miles de personas se convocaron en la Puerta del Sol (Madrid) y en el resto de las plazas de las capitales de España para protestar en contra de los pactos realizados por el actual presidente, Pedro Sánchez.
Con banderas de España y tantas otras de la Unión Europea, los asistentes a la marcha (que fue convocada por el Partido Popular), mostraron carteles pidiendo cárcel para Sánchez y para Carles Puigdemont y hasta se pudo leer la leyenda “Sánchez dictador”.
Durante los actos, que culminaron con el himno español, se realizaron dos pedidos muy puntuales: el primero, una huelga general, clamada por la mayoría de los asistentes; y el segundo, la repetición electoral, que ha sido solicitada por Alberto Núñez Feijóo, actual mandatario del Partido Popular.
Por su parte, en Francia y con la presencia de la primera ministra, Elisabeth Borne, más de 180.000 personas en todo el país marcharon en contra del antisemitismo creciente desde que estalló la guerra entre Israel y el grupo terrorista HAMÁS, en la Franja de Gaza.
Además de la participación de representantes de varios partidos de izquierda, conservadores y centristas del partido de Emmanuel Macron, también estuvieron presentes familiares de algunos de los 40 franceses asesinados en el ataque de HAMAS. A pesar de que este no fue al acto, se reportó a través de la red social X y expresó su solidaridad con la marcha y le pidió a la ciudadanía luchar contra el “resurgimiento inaceptable del antisemitismo desbocado”.
Es importante destacar que de acuerdo a los datos emitidos hasta el sábado por el Ministerio del Interior, se habían registrado 1.247 actos antisemitas desde el 7 de octubre, casi tres veces la cantidad de todo el 2022.