

El trámite del juego fue más parejo de lo esperado. Tras un primer tiempo sin goles, en el que el VAR tuvo que intervenir correctamente para anular por fuera de juego de Robert Lewandoski una acción que había terminado en gol de Joshua Kimmich, la emoción llegó en el complemento.
El marcador se rompió a los 15 minutos de la segunda mitad gracias a un centro frontal para Lewandowski que exigió la salida apresurada de Nahuel Guzmán. El balón pegó en ambos y tras una carambola quedó servido para Benjamin Pavard, quien en el área definió sin inconvenientes. En una acción poco comprensible, y desoyendo los consejos de la FIFA, el juez de línea levantó la bandera en plena celebración para indicar una supuesta posición adelantada del delantero polaco. Afortunadamente, el VAR intervino para marcar el error del asistente y convalidar el tanto. No obstante, en una de las repeticiones se puede observar cómo la pelota le rebota en la mano, por lo que el gol estuvo pésimamente convalidado.
Con el triunfo del cuadro alemán, el ciclo de Hansi Flick, el DT que logró ganar cinco trofeos al hilo –Bundesliga, Copa Alemana, Champions League y las respectivas Supercopas– repitió lo que solamente Pep Guardiola logró con el Barça en aquella campaña 2008/09, el Sextete.