

“La participación de Cipriani se burla de la declaración de los cardenales sobre la supuesta importancia del problema de los abusos. Garantiza a los obispos abusadores el continuo apoyo de sus colegas, al tiempo que envía un mensaje preocupante a las víctimas de abusos y reaviva la inquietante idea de que la Iglesia es más segura para el clero acusado que para los niños”, reza el comunicado presentado por la ONG estadounidense, que lleva la firma de su codirectora, Anne Barrett.
Además de cuestionar la decisión por parte del Vaticano de dejar participar al cardenal peruano, el escrito también deja asentado que “la obligación más sagrada de la Iglesia es proteger a los niños del abuso”, ya que “están en juego la vida y el bienestar de los niños, al igual que la autoridad moral de la Iglesia”.
Es preciso recordar que en el año 2019 y luego de haber realizado una investigación tras recibir una carta de una víctima de abuso, Francisco sancionó a Cipriani impidiéndole usar los símbolos inherentes al cargo, le ordenó salir del país como así también alejarse de la vida pública.