El desalojo, que fue el 494 desde que Jorge Macri está en el cargo, se produjo en un edificio de Sarmiento 2.902 y Boulogne Sur Mer, y además de la Policía de la Ciudad también colaboraron personal de Emergencias, el cuerpo de Bomberos y la Red de Atención.
El inmueble, que estaba ocupado hacía más de seis años por un grupo de cartoneros que recorrían el barrio, funcionaba como un alojamiento informal y aguantadero, tal y como lo describieron los vecinos de la zona.
Tras el operativo, Macri se mostró conforme con la labor realizada por las fuerzas de seguridad y expresó: “Los bienes de los porteños son sagrados. Así como terminamos con los piquetes y acampes, tenemos la decisión política de terminar con las usurpaciones. La regla es clara: en la Ciudad, la prioridad se respeta y la ley se cumple”.