La decisión tomada por el juez Fernando Sosa también golpeó de lleno a nueve imputados más, quienes fueron ubicados como presuntos organizadores o “segundas líneas” y como presuntos miembros de la banda que, de acuerdo con las investigaciones, habría tenido sus inicios en abril del 2020 en el barrio 7 de Septiembre.
Según la hipótesis que realizaron los fiscales Georgina Pairola y Luis Schiappa Pietra, la banda desplazó a dealers que respondían a Brian Emanuel “Negro Brian” Villalba y comenzó a dominar los barrios 7 de Septiembre, Stella Maris, La Bombacha y Emaús, donde consiguieron instalar su “negocio” narco.
Es preciso resaltar que, pese a que “Laucha” Ghiselli figura como el jefe de la barra, los investigadores consideran que el verdadero líder es Matías Ignacio Gazzani, quién actualmente se encuentra prófugo y es intensamente buscado por las autoridades policiales, quienes ofrecen una recompensa de 60 millones de pesos.