De acuerdo con el informe realizado por C&PM, que se basó en los datos provistos por el Banco Central de la República Argentina, el saldo promedio de financiamiento con tarjeta de crédito en dólares fue superior a los 700 millones y se dio como una consecuencia del impacto del turismo y las compras online en el exterior.
Asimismo, el relevamiento también arrojó que el gasto con tarjeta en pesos fue muy elevado, con un saldo mensual cercano a los $20 billones, alcanzando valores históricos similares a los primeros meses del 2018.
Uno de los socios de C&PM, César Bastién destacó que más del “70% de los consumos serán abonados con dólares que ya están en posesión de los usuarios”, aclarando que “no representarán una demanda de divisas para las reservas del BCRA”.
Por último, Bastién comentó que “a medida que las condiciones macroeconómicas se estabilicen y, en especial, la tasa de interés de la economía baje, es esperable que las tarjetas continúen expandiéndose como medio de pago y que sean el canal más eficaz para financiar el consumo y dinamizar las ventas minoristas”.