Desde el Vaticano, el Papa Francisco dijo que, “en este momento, Argentina tiene un nivel impresionante de inflación” y explicó que, en 1955 cuando él terminó la escuela secundaria, “el nivel de pobreza era del 5%”, en tanto, hoy la misma "está en el 52%”. Y opinó: “¿Qué pasó? Mala administración, malas políticas”.
Por otro lado, contó una historia teológica-cultural: “Dicen que los ángeles custodios de los países se fueron a quejar a Dios y le dijeron ‘fuiste injusto con nosotros porque a cada uno nos diste riqueza, minería, agricultura o ganadería y a los argentinos les diste todo, tienen todas las riquezas’. Dicen que Dios pensó un poco y dijo: ‘Para equilibrar’ les di a los argentinos’”. Y agregó: “Yo soy argentino, pero algo de verdad hay porque no terminamos de llevar adelante nuestras cosas”.
Luego de la dura crítica del Papa, la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, intentó salvaguardar al Gobierno Nacional y -como siempre- responsabilizó a la gestión de Mauricio Macri. “Todos sabemos que es producto de los cuatro años del macrismo que estamos todavía remontando”, dijo.