La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, había elevado un planteo ante la Cámara Federal de Casación Penal, en la causa que investiga el espionaje a políticos, periodistas y gremialistas, durante el mandato de Mauricio Macri. Finalmente, los jueces Mariano Borinsky, Javier Carbajo y Gustavo Hornos, consideraron no darle lugar a estas objeciones y convalidaron los procesamientos y faltas de mérito de todos los involucrados.
Ante esto y una vez presentado el fallo, en el mismo se resaltó: "El recurrente, no alcanzó a demostrar el agravio actual de tardía o imposible reparación ulterior que le genera la decisión dictada por el a quo, que permita equipararla a definitiva, a los efectos de habilitar la intervención de esta Cámara".
En este sentido, el escrito completó: "Es la doctrina judicial emanada de los precedentes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el sentido de que las resoluciones cuya consecuencia sea seguir sometido a proceso penal, no constituyen sentencia definitiva ni resultan equiparables a tal, salvo que se verifique un perjuicio que no admita reparación ulterior".